Cuántas veces, incluso sin ser conscientes, trabajamos para "tener razón", para confirmarnos en el sitio donde estamos. Cuántas veces decimos "eso ya lo he probado" cuando en realidad ni estuvimos cerca de hacerlo.
A veces nos gusta tanto donde estamos que en vez de trabajar para conseguir nuestros objetivos, lo hacemos para afianzarnos en el lugar en el que estamos más cómodos.