A veces hasta en un sitio familiar te puedes quedar deslumbrado. ¿Cómo de potente tiene que ser lo nuevo para que le prestes atención?
¿Y si el cambio que necesitas está en lo nuevo? A veces estamos tan cómodos en nuestra zona de confort que se nos olvida que hay que mirar más allá. Porque igual, ahí, está lo que buscamos.